Continuamos nuestro repaso a los ordenadores de 8 bits con su tercera entrega. En esta ocasión nos centraremos en el AMSTRAD CPC, ordenador, por la parte que me toca, al que le he tenido y tengo todavía, un especial cariño. Erróneo sería hablar y pensar de él en pasado teniendo en cuenta que, aun hoy en día, sigo disfrutando de sus juegos, mediante emulador, eso sí. Técnicamente superior al Spectrum y aparecido a raíz del éxito de éste, ésta es su historia…
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Todo comienza en el año 1968, cuando un británico, un tal Alan Michael Sugar funda una empresa denominada AMSTRAD Electronic Consumer (Amstrad = Alan Michael Sugar Trading) En sus primeros años dicha empresa se dedicó a comercializar todo tipo de aparatos electrónicos, desde TV y radios hasta amplificadores de audio, entre otros. Sin embargo, no fue hasta principios de los 80, concretamente en el año 1984, cuando decidieron fabricar su primer ordenador personal: El Amstrad CPC 464. Estaba claro, viendo el éxito cosechado por la competencia en el sector, que no podían dejar escapar la oportunidad de sacar tajada en un mercado tan suculento por aquel entonces, y aunque no consiguió desbancar a Spectrum y Commodore, desde luego se convirtió en un gran éxito en los cinco países donde se comercializó: Reino Unido, Francia, Australia, Alemania y España.
Amstrad CPC464
Al igual que el Spectrum, el CPC 464 contaba con unidad de cinta integrada dentro del mismo teclado y la posibilidad de adquirirlo junto a un monitor de fósforo verde o a todo color, éste último notablemente más caro. Utilizaba lenguaje Basic y a nivel gráfico, gracias a su chip, un Motorola CRTC 6845, superaba ampliamente al ordenador de Sinclair, con una mayor cantidad de colorido, aunque mucha menor resolución (y velocidad) Además contaba con 3 modos de visualización de pantalla:
Modo 0: 160x200 píxeles con 16 colores más los bordes
Modo 1: 320x200 píxeles con 4 colores a la vez más los bordes
Modo 2: 640x200 píxeles con 2 colores más los bordes
Menú Basic
Modo 0, 1 y 2
Al año siguiente en 1985, apareció un nuevo modelo, el CPC 664. Dicho modelo sustituyó la unidad de cassette por una unidad de disco, que soportaba discos de 3”, pudiéndose utilizar ambas caras (169 o 178 Kb cada cara). No obstante, poco tiempo pasó hasta salir un nuevo CPC al mercado, con vistas a convertirse en el AMSTRAD definitivo (aunque no en el último como veremos más adelante). Dicho modelo se llamó Amstrad CPC6128, el cual, con un precio similar al CPC464, incorporó y amplió nuevas características, como por ejemplo, un zócalo para conectar y utilizar cintas de cassette, o una ampliación de 64 Kb en la RAM y 16Kb en la ROM (En total, 128 Kb de RAM Y 48Kb de ROM) Por supuesto, junto al ordenador se regalaba un disco con juegos y programas como venía siendo habitual en la casa.
Algunos años pasaron, y ya en 1991, en pleno ocaso de los 8 bits aparecieron los modelos Amstrad CPC464+ y Amstrad CPC6128+, cuyas principales diferencias radicaban en un aumento exponencial en la paleta de colores, con un total de 4096 (aunque en la práctica solo se podían usar 32 colores simultáneamente) y una mejora en el manejo de sprites. El 6128+ incluía además un zócalo para utilizar cartuchos, en sustitución del zócalo para cintas. Este modelo sirvió, además, de base para la creación de una consola, la Amstrad GX4000, que pasó sin pena ni gloria por el mercado.
Amstrad GX4000, irrupcion fallida en el mundo de las videoconsolas
Como anécdota podemos comentar la aparición de un modelo exclusivo en España, el Amstrad CPC 472. Todo vino por una normativa según la cual, todo ordenador con 64 KB o menos vendidos en España debían incluir la letra “ñ” en su teclado. En caso contrario, debían pagar un impuesto. Así, la empresa Indescomp, distribuidora oficial de Amstrad en España, sin el permiso de Amstrad en Inglaterra, fabricó un CPC464 con 8 Kb más evitando el pago de dicho impuesto.
De todos modos, y como ya indicábamos líneas atrás, los 16 bits irrumpían fuertes en el mercado, llevando a los 8 bits a una época de decadencia que ya no tenía remedio.
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